Por su parte, el oro se encuentra cada vez más limitado por sus directrices de largo y corto plazo, de manera que el seguimiento se hace más sencillo.
Por arriba tenemos la gran resistencia en forma de directriz bajista de largo plazo y que arranca en agosto de 2.011, que hoy pasa por los 1.370 puntos. El día que la rompa llamará mucho la atención, pues el oro subirá mínimo un 2-3%. Pero todavía no hemos llegado a ese día, aunque creemos que queda poco. En tal caso, el potencial alcista del oro será muy importante, y aconsejaremos su compra cada uno en el porcentaje que la volatilidad de este activo le permita.
Por abajo, no sólo están los 1.300$ que actuaron como soporte recientemente, sino que la directriz alcista nos permite subir la referencia hasta los 1.320$, de manera que mientras los precios se sitúen por encima de este nivel, el escenario más probable es de continuación alcista a corto plazo.
En resumen: por arriba atención a los 1.370$, nivel clave y que afecta a la estructura de largo plazo de este activo, y por abajo la referencia son los 1.320$, nivel que permite mantener un sesgo alcista a corto plazo.