Durante el mes de enero asistimos a un hecho histórico en Europa en lo que a economía y a finanzas se refiere, y es que el Banco Central Europeo (BCE) puso en marcha un plan de compra masiva de deuda de más de un billón de euros, con el doble objetivo de reactivar la economía y alejar el riesgo de deflación en Europa.
Lo que tiene que saber todo inversor es que este plan es GASOLINA para las bolsas europeas, las cuales atesoran un potencial alcista importante a medio y largo plazo (a corto plazo siempre hay vaivenes al calor de otras noticias) gracias al enorme plan de inyección de liquidez del BCE.
Hasta ahora GRECIA ha frenado el impacto de este QE, pero una vez conseguidos los acuerdos entre Grecia y sus acreedores, tenemos que estar atentos al comportamiento de las bolsas europeas pues pueden confirmar un escenario claramente alcista.
En este sentido, atentos a un cierre mensual del selectivo francés CAC 40 por encima de los 5.300 puntos, pues en tal caso habría que apostar claramente al alza en bolsa europea.
El plan se conoce como QE o Quantitative Easing, que significa plan de expansión cuantitativa o de compra de deuda, pero nos aclararemos más si lo llamamos máquina de imprimir billetes, al igual que se ha hecho en EEUU y Reino Unido (hace ya 5 años) y recientemente en Japón.
De esta manera, Mario Draghi, que ha apuntalado su credibilidad y ha conseguido superar las expectativas del mercado por el volumen final del plan, quiere revitalizar la economía de la eurozona y contrarrestar la deflación con un programa de compras mensuales de bonos por valor de 60.000 millones de euros desde el próximo 1 de marzo hasta al menos septiembre de 2016, lo que significa que en septiembre del año que viene (y podrá ampliarlo más si fuera necesario), el BCE habrá comprado más de un billón de euros, concretamente 1,14 billones de euros, que equivale a unos 3.000 euros por cada uno de los 337,4 millones de ciudadanos que comparten el euro.
El BCE llevaba años posponiendo esta decisión por una mezcla de presiones políticas (básicamente por parte de Alemania por miedo a que los países se relajen y no adopten las reformas necesarias en cada economía nacional), por fallos del diseño del euro y por cierto conservadurismo.
Con este plan el BCE persigue que al final los bancos presten, las empresas inviertan, la gente gaste y la máquina de la economía vuelva a engrasarse, de manera que al final vuelva el crecimiento y la inflación se sitúe en niveles normales (cerca pero por debajo del 2%).
Dicho esto, lo que está claro es que un plan de esta envergadura por valor de más de un billón de euros va a influir en nuestras inversiones, pues tiene una gran repercusión sobre todos los mercados financieros, no sólo en los mercados bursátiles o de renta variable, sino también en los de divisas y los de deuda o renta fija.
En cuanto a la influencia sobre las bolsas europeas, los expertos lo tienen claro, y es que este plan es GASOLINA para las bolsas europeas.
Por tanto, nos debe quedar clara una idea muy importante, y es que las bolsas europeas tienen un potencial alcista importante a medio y largo plazo (a corto plazo siempre hay vaivenes al calor de otras noticias) gracias al enorme plan de inyección de liquidez del BCE. De ahí que durante este año 2015 parte de nuestras inversiones se materialicen en bolsa europea o alguna de sus economías nacionales, como España, Francia, Alemania o incluso Portugal.
En el caso del selectivo francés CAC 40, desde un punto de vista técnico nos encontramos en un momento decisivo, pues se enfrenta actualmente a su directriz bajista de largo plazo dibujada en color rojo en el siguiente gráfico.
Como se puede observar, un cierre mensual por encima de los 5.300 puntos haría que el índice superara dicha directriz bajista tan importante desde un punto de vista de largo plazo, confiriéndole en tal caso un potencial alcista muy elevado al índice.
Además, viendo este otro gráfico semanal, vemos como dicho nivel de los 5.300 puntos también son los máximos de marzo 2015 y también es una zona de resistencia ya que es la parte alta del canal alcista de medio plazo de color azul, que si es superado al alza, de nuevo otorga fuerte potencial alcista al índice.
Pero hay que esperar y ver, y exigir un cierre mensual (para evitar señales falsas en diario o semanal), superior a los 5.300 puntos, ya que es una zona de fuertes resistencias que podrían también servir de freno a la tendencia alcista actual.
Desde un punto de vista de corto plazo, esperamos caídas leves en el entorno del 2-3% a niveles próximos a los 5.000 puntos, para después continuar con la escalada a los máximos señalados anteriormente, y en esos niveles ver si se superan con fuerza o no.
Desde un punto de vista de corto plazo, esperamos caídas leves en el entorno del 2-3% a niveles próximos a los 5.000 puntos, para después continuar con la escalada a los máximos señalados anteriormente, y en esos niveles ver si se superan con fuerza o no.