Durante este mes de enero hemos asistido a un hecho histórico en Europa en lo que a economía y a finanzas se refiere, y es que el Banco Central Europeo (BCE) ha puesto en marcha su plan de compra masiva de deuda de más de un billón de euros, con el doble objetivo de reactivar la economía y alejar el riesgo de deflación (inflación demasiado baja o incluso negativa) en Europa. Analicemos esto detenidamente así como las fuertes implicaciones alcistas que tendrá a nivel bursátil.

El plan se conoce como QE o Quantitative Easing, que significa plan de expansión cuantitativa o de compra de deuda, pero nos aclararemos más si lo llamamos máquina de imprimir billetes, al igual que se ha hecho en EEUU y Reino Unido (hace ya 5 años) y recientemente en Japón.
De esta manera, Mario Draghi, que ha apuntalado su credibilidad y ha conseguido superar las expectativas del mercado por el volumen final del plan, quiere revitalizar la economía de la eurozona y contrarrestar la deflación con un programa de compras mensuales de bonos por valor de 60.000 millones de euros desde el próximo 1 de marzo hasta al menos septiembre de 2016, lo que significa que en septiembre del año que viene (y podrá ampliarlo más si fuera necesario), el BCE habrá comprado más de un billón de euros, concretamente 1,14 billones de euros, que equivale a unos 3.000 euros por cada uno de los 337,4 millones de ciudadanos que comparten el euro.
El BCE llevaba años posponiendo esta decisión por una mezcla de presiones políticas (básicamente por parte de Alemania por miedo a que los países se relajen y no adopten las reformas necesarias en cada economía nacional), por fallos del diseño del euro y por cierto conservadurismo. Sin embargo, la inflación ha entrado en terreno negativo en diciembre de 2014 y al BCE ya se le han agotado todas sus armas convencionales, pues los tipos de interés ya están en el 0% y aun así hay riesgos de deflación sostenida.
Con este plan el BCE persigue que al final los bancos presten, las empresas inviertan, la gente gaste y la máquina de la economía vuelva a engrasarse, de manera que al final vuelva el crecimiento y la inflación se sitúe en niveles normales (cerca pero por debajo del 2%).
Dicho esto, lo que está claro es que un plan de esta envergadura por valor de más de un billón de euros va a influir en nuestras inversiones, pues tiene una gran repercusión sobre todos los mercados financieros, no sólo en los mercados bursátiles o de renta variable, sino también en los de divisas y los de deuda o renta fija. Veamos cada uno de ellos.
1- INFLUENCIA SOBRE LAS BOLSAS EUROPEAS
Los expertos lo tienen claro, y es que este plan es GASOLINA para las bolsas europeas, y especialmente serán las periféricas las que más partido saquen a la recuperación económica. En este contexto el mercado español se perfila como el favorito para aprovechar estos estímulos, y otros mercados que deberían hacerlo bien son el italiano o el portugués.
Por tanto, nos debe quedar clara una idea muy importante, y es que las bolsas europeas tienen un potencial alcista importante a medio y largo plazo (a corto plazo siempre hay vaivenes al calor de otras noticias) gracias al enorme plan de inyección de liquidez del BCE. De ahí que durante este año 2015 parte de nuestras inversiones se materialicen en bolsa europea o alguna de sus economías nacionales, como España, Alemania o incluso Portugal.
Llegado a este punto, ahora queremos aportar nuestra versión particular de lo que ha significado el plan del BCE, y para ello nos vamos a ayudar del gráfico del índice FTSE EUROTOP 100 que se recoge a continuación.

Si nos fijamos en el gráfico, vemos que este índice europeo se está enfrentando en la actualidad a una zona crítica, que es la directriz o línea de tendencia roja de largo plazo que une los máximos de 2000 y 2007. Esta línea de tendencia es muy importante, pues cuando el índice se tropezó con ella en 2000, se produjo la burbuja tecnológica y cuando se topó de nuevo con ella en 2007 se produjo la crisis subprime y la consiguiente crisis financiera mundial.
Ahora vemos que ha conseguido superarla, y no creemos que hubiera sido posible sin la puesta en marcha del plan del BCE. Por tanto, nuestra opinión es que si no se hubiera puesto en marcha este plan del BCE, habríamos entrado en otra crisis bursátil, y viceversa: gracias a este plan hemos evitado una nueva crisis bursátil y ahora las perspectivas son muy positivas por lo menos para la bolsa europea!!!.
2- MERCADO DE DIVISAS: EL EURO Y EL PLAN DEL BCE.
Este plan del BCE ha hecho que el euro se hunda, tal y como podemos ver en el gráfico que mostramos a continuación.

La razón de esto se debe principalmente a las diferencias de rumbo de las políticas monetarias de la eurozona y de EEUU: si en la primera se acaba de poner en marcha un histórico plan de compra de deuda para afrontar una escenario de deflación y de estancamiento económico, en EEUU ya lo han quitado (después de 5 años en vigor) gracias a que la economía está creciendo con vigor, y además hay previsiones de una futura aunque no inmediata subida de tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) americana.
Por tanto, el contraste entre un banco central que retira liquidez (en dólares) y otro que pretende ampliarla (en euros) está llevando a una depreciación del euro frente al dólar.
Nuestras previsiones técnicas son que el euro siga cayendo hasta niveles de 1,07 durante las próximas semanas, para apoyarse en la base del canal bajista señalado en el gráfico anterior en color rojo, y de ahí experimentar un rebote una vez que se hayan disipado las dudas con Grecia. Y todo esto dentro de una tendencia bajista de largo plazo (según el canal o líneas paralelas dibujadas en rojo), que llevará al euro a niveles por debajo de los señalados.
3- MERCADO DE DEUDA O DE RENTA FIJA.
Por último, y como no podría ser de otra manera, un programa de compra de deuda tiene que hacerla subir, y por esta razón no para de subir con fuerza la renta fija en los últimos meses, tal y como podemos ver en el siguiente gráfico que recoge la evolución del bund o bono alemán.

Un inciso: si el precio del bono sube, hay que saber que la rentabilidad o el interés del bono baja, por difícil que sea entenderlo (a mí me sigue costando mucho).
Dicho esto, la consecuencia del plan de Draghi en los mercados de deuda ha sido una oleada de mínimos históricos en los intereses o rentabilidades de los bonos de todos los países de la zona euro (0,4% en Alemania, 0,6% en Francia, 1,5% en España y 1,7% en Italia), así como una caída de las primas de riesgo de los países de la zona euro a excepción de Grecia (las cuales son la diferencia entre la rentabilidad de sus bonos con la del bono alemán).
Un cordial saludo,